11-S: LOS TERRORISTAS NO ACCEDIERON A LA CABINA DE MANDO DEL VUELO 77

(PilotsFor911Truth.org) – Se han encontrado nuevos datos sobre el vuelo 77 de la American Airlines proporcionados por un investigador independiente, por un programador de computadoras de Australia, que expone la Evidencia de que el secuestro del vuelo 77 nunca se llevó a cabo. Un parámetro de datos del panel de cabina “FLT DECK DOOR”, que ha sido decodificado, y que conocen muy bien todos los pilotos y los investigadores del 9 / 11 Truth de la National Transportation Safety Board (NTSB) a través del Freedom of Information Act.

En la mañana del 11 de septiembre 2001, el vuelo 77 de American Airlines partió, en teoría, del aeropuerto internacional Dulles con destino a Los Angeles a las 8:20 am. Según los informes y datos aparecidos, el secuestro tuvo lugar entre las 08:50:54-08:54:11 [1], y en el que los secuestradores al parecer estrellaron el avión contra el Pentágono a las 09:37:45. Fue reportado por la CNN, de acuerdo a Ted Olson, su esposa Barbara Olson le había llamado desde el avión indicandole que “… todos los pasajeros y el personal de vuelo, incluidos los pilotos, fueron conducidos a la parte trasera del avión por los secuestradores armados …” [2].

Sin embargo, según consta en los datos de vuelo proporcionados por la NTSB, la puerta de la cabina de vuelo, nunca se abrió estando en pleno vuelo. ¿Cómo fue, en ese caso, que los secuestradores accedieran a la cabina, coaccionando a los pilotos, y llevar la aeronave en rumbo de colisión contra el Pentágono si permaneció cerrada la puerta de acceso a la cabina? [3] ¿Quién miente? ¿Quién grabó la cinta de la señora Olson?

PilotsFor911Truth.org fue fundada en agosto de 2006, es una organización en la que cada vez se inscriben un mayor número de profesionales de la aviación de todo el mundo. La organización ha analizado los datos proporcionados por la National Transportation Safety Board (NTSB) del el ataque al Pentágono, los acontecimientos que sucedieron en Shanksville, PA y el ataque al World Trade Center. Han encontrado que los datos no son compatibles con la historia del gobierno. El FBI / NTSB se niegan a realizar ningún tipo de comentarios. Para los pilotos de 9 / 11 Truth los estamentos gubernamentales no han ofrecido nada creíble hasta el momento. 

Sin embargo, existe una ingente información contradictoria por parte de los datos reales que  no cuadran con la información dada en un principio y que, los organismos oficiales y los funcionarios gubernamentales junto con los principales medios de comunicación se niegan a reconocer.

Pueden ustedes inscribirse y encontrar toda la información real en:

http://pilotsfor911truth.org/core.html para la lista de miembro de pleno derecho.

http://pilotsfor911truth.org/join para unirse.

[1] Hijacker Timeline –

http://pilotsfor911truth.org/forum/index.php?

showtopic=17

[2] Common Strategy Prior to 9/11/2001 –

http://pilotsfor911truth.org/pentagon.html

[3] Right click and save target as here to download csv file with “FLT DECK DOOR” parameter.

Fuente: Escuadrón de la verdad

UN TESORO LLAMADO PETRÓLEO (EN BUSCA DE LA ISLA PERDIDA DE MÉXICO)

Bitácora de navegación. Día 3.

Los ingresos de México dependen en gran medida del petróleo que se encuentra en las aguas del Golfo. Pero todo ese mar no es sólo de los mexicanos; lo comparten con Estados Unidos y Cuba. En medio de los tres, además, hay aguas internacionales.

¿Y qué tiene que ver todo eso con la isla Bermeja? Que si la isla estuviera en el mar, empujaría las fronteras marítimas de México más al norte en un área que se cree rica en petróleo. Cuando se deciden los límites marítimos no sólo se toman en cuenta las costas, sino también las islas.

En 1997 el gobierno mexicano firmó un tratado con Estados Unidos para dividir un área -en aguas internacionales- conocida como Hoyos de Dona. Tras consultar los mapas, las autoridades de México buscaron la Bermeja con la esperanza de obtener una mayor porción del mar para su explotación, pero no pudieron localizar la isla.

«En este país, el Golfo de México alberga el mayor volumen de las reservas, de potencial petrolero y de ahí se extraen la mayor cantidad de barriles de crudo desde ya hace unos 20 años y esta situación continuará así. Investigando el tema del petróleo llegamos al tema tan misterioso de la Bermeja», me explica Fabio Barbosa, investigador de la Universidad Nacional Autónoma de México.

«Bermeja saltó al tema del petróleo sin que fuera nuestra intención estudiarla. Es una isla que sin duda existió en el Golfo de México. No sabemos cuándo ni cómo desapareció, pero había permanecido durante siglos olvidada», asegura con pasión Barbosa en el campus universitario en la capital mexicana.
«El tema de la Bermeja nos lleva a la pregunta de cómo es posible que una isla que aparece en muchísimos mapas de pronto ya no esté. Es un tema que personalmente me indigna. Me indigna que un país con una historia tan rica como éste no tenga sus recursos bien administrados. La importancia de la isla va más allá petróleo, tiene que ver con el cuidado del territorio», enfatiza el investigador de la UNAM.

«En estos momentos la explotación petrolera en la región de Hoyos de Dona -por la que se llegó al tema de Bermeja- no es muy prometedora. Pero hay otro espacio también en aguas internacionales, la Dona Oriental más cercana a Florida, que permanece sin negociar. Probablemente 70% de este espacio vaya a EE.UU., un 20% a México y un 10% a Cuba», me asegura Barbosa.

Nuevo punto de partida

La historia adquiere nueva vida. El senador mexicano Felipe González, del oficialista Partido Acción Nacional, enfatiza que Bermeja podría volver a ser punto de partida para la negociación de este nuevo espacio marítimo a fin de explotar petróleo. El nuevo acuerdo podría firmarse a finales de 2010 o principios de 2011. Por ello el tema de la Bermeja adquiere una renovada brisa.

«Si Bermeja existiera nos daría a los mexicanos mucho más mar territorial del que tenemos en un momento en que estamos negociando con Estados Unidos una zona de delimitación para la explotación de petróleo en aguas profundas», me cuenta el legislador en sus oficinas en Ciudad de México.

«Tenemos que agotar toda la información y saber si existe o no. Y después evitar que se convierta en una leyenda que en nada nos va ayudar. Si no existe entonces tomaremos en cuenta las otras islas y ahí iremos a buscar nuestros límites marítimos», concluye el senador González.

La potencial riqueza que Bermeja llevaría a los mexicanos ha provocado una gran cantidad de especulaciones y teorías acerca del destino de la isla.

Basta con realizar una simple búsqueda en internet para encontrar algunas de ellas.

Unos dicen que, dada su importancia, presuntamente la CIA dinamitó la isla, para borrarla del mapa e incluso hay quienes aseguran que el gobierno mexicano fue cómplice de esta acción. Muchos analistas se aprestan a desestimar estos rumores como «tonterías».

Bermeja, con o sin petróleo, sigue escabullándose. Al no aparecer en las aguas del Golfo, su vecino más próximo, el Arrecife Alacranes, se convirtió en las isla mexicana más al norte en dichos mares y en el punto de referencia para los tratados marítimos.

Hacia allá entonces habrá que zarpar para ver si es posible hallar más pistas del destino de Bermeja.

DAVID CUEN

BBCNews

TODO PARECE INDICAR QUE SE ACERCA EL MOMENTO

En medio de las muchas noticias sorprendentes que están apareciendo en las últimas semanas, urge situarse en la situación actual.

1-El sistema de información y de creencias, sustentado en los medios de comunicación ha estallado en mil pedazos. No bastando con el batacazo de la supuesta pandemia, anunciada a bombo y platillo por la Organización Mundial de la Salud, convertida en una vulgar gripe, los medios de comunicación han ocultado la verdadera pandemia extendida por la firma Baxter por el centro de Europa que ha matado a más de 400 personas cuando escribo estas líneas. Las consecuencias van a ser fulminantes: el ministerio de salud mundial que es en realidad la OMS ha perdido cualquier tipo de credibilidad (al igual que los ministerios de salud de los países), de manera que la confianza en las creencias sobre la salud han desaparecido YA por completo. Ya nadie podrá decir “lo ha dicho el médico” o “lo ha dicho la tele” como señal de que algo es verdadero porque se le podrá replicar certeramente “y con la gripe A, ¿qué? ¿No decían que iba a ser tan peligrosa?”. Casi tan importante como esto, el cartel de las grandes compañías farmacéuticas tiene sus días contados porque compañías como Novavax o Baxter están directamente implicadas en este envenenamiento masivo y otras, como Glaxo, ya han tenido que reconocer que su vacuna era peligrosa, retirándola del mercado (Canadá). Las acciones en bolsa de estas compañías caerán en picado en cuanto comience una investigación sobre su responsabilidad.

2-Unas pocas semanas antes de la cumbre sobre el clima que, bajo la excusa del calentamiento global, iba a establecer el Nuevo Orden Mundial, un grupo de hackers exponen al público los correos electrónicos de la Universidad East Anglia de Inglaterra, que era el centro de la” iglesia del CO2″, dejando claro un arsenal de corrupción, falacias y pervertida práctica científica que acaba, de una vez  y para siempre, con el mito de que el ser humano haya podido crear por sí solo los cambios climatológicos que estamos viviendo. El movimiento ecologista, comenzando con Greenpeace, está herido de muerte y las bajas de socios en todo el mundo cuando se conozca mundialmente la verdad le conducirá, inexorablemente, a su desaparición en un espacio de seis meses. Digo ‘cuando se conozca’ porque, a pesar de que en Inglaterra y Estados Unidos el asunto está apareciendo en los medios, en países como España se está ocultando generalizadamente… lo cual será otro de los motivos para la pronta desaparición de los grandes grupos de comunicación, partícipes de esta ocultación a la ciudadanía.

3-Unos pocos días después de que se revelaran estos correos electrónicos sobre el “climagate” y coincidiendo con los prolegómenos del juicio del 11-S, salen a la luz otro arsenal de mensajes de teléfono móvil de las personas que estuvieron en las torres gemelas aquella fatídica fecha. La coincidencia de ambos hechos me lleva a pensar que estamos ante una revelación bien organizada por elementos leales a la Humanidad dentro de organismos y servicios de inteligencia. Curiosamente (y todavía deja ver más claro la censura de la anterior noticia) esta vez sí aparece en los medios de comunicación españoles, pero al leer las informaciones en diferentes periódicos del mundo queda patente que los redactores están haciendo un “cortar y pegar” de una noticia de agencia, es decir, que no han leído los mensajes. ¿Qué pondrán? Pues, con toda seguridad, dado que son militares y policías, relatarán las explosiones habidas en las Torres, principal argumento para desmentir la teoría oficial, lo que nos colocará inevitablemente ante la verdad del ataque sionista.

Reuniendo todas estas piezas del rompecabezas, con la evidencia de que hay un grupo de personas en las altas esferas que han decidido eliminar a una parte de la Humanidad por medio de virus, Barack Obama va a enfrentar la recogida del premio nobel de la paz en Oslo bajo los rumores de un anuncio sobre vida extraterrestre.

Nadie sabe lo que pueda ocurrir pero lo que sí puedo decir es que ahora sí se dan las condiciones para que ello ocurra, pues la falsa crisis económica y el rescate de los bancos, el ataque bioterrorista por parte de las compañías farmacéuticas, el fraude del cambio climático y esta postrera revelación de información sobre el 11-S han dejado a la opinión pública mundial dispuesta a CREER EN CUALQUIER COSA QUE NO SEA LO QUE DICE LA TV, incluido el tema extraterrestre.

Las cartas están ya encima de la mesa. La ventana de oportunidad para el Nuevo Tiempo está abierta. ¿Qué va a ocurrir? Qui lo sa… Lo único que se puede decir es “cualquier cosa”.

PD: Me cuenta un amigo que trabaja en Televisión Española que las bajas por depresión e, incluso, intentos de suicidio, son muchas en este medio de comunicación. La conciencia paga factura y saber que estás mintiendo (y que tu familia y amigos lo saben) es algo que tu sistema nervioso paga…

Rafapal

 

EL ENIGMA DE LOS MAPAS(EN BUSCA DE LA ISLA PERDIDA DE MÉXICO)

Bitácora de navegación. Día 2.

Los mapas tienen el encanto de la historia, pero también del misterio. Algunos de ellos suelen asociarse a un tesoro. En nuestro caso apuntan a un tesoro llamado Bermeja.

En los documentos del siglo XVI y el siglo XVII, la isla Bermeja aparece como un adorno permanente de las aguas del Golfo de México (clic ver Galería de Imágenes[en el artículo original]) ubicada, sin embargo, en distintas posiciones. La más común: Latitud 22° 33′ Norte, Longitud 91° 22′ Oeste.

«La Bermeja está en los mapas oficiales españoles desde el siglo XVI. No es una fantasía aparentemente», me dice Michel Antochiw, investigador de cartografía e historia del sureste de México.

Pero advierte: «debemos preguntarnos si la cartografía es confiable porque existen cientos o miles de mapas, pero ¿son realmente confiables? Los cartógrafos europeos repetían mapas anteriores. No podemos decir que porque aparece un accidente en un mapa éste es permanente y efectivo. ¿Por qué? Porque nadie ha ido a comprobarlo», insiste.
Desde 1539 hasta 1775 Bermeja vivió la certeza de un fantasma, apareciendo en la gran mayoría de los mapas, sin que nadie certificara su ubicación. Pero en 1775, la armada española organizó una expedición al mando de Miguel de Alderete para localizar Bermeja y otras islas.

«Aquí está el diario de abordo de Alderete. Hora por hora indica la dirección que va tomando, el rumbo del viento y la profundidad del mar. Hace el recorrido completo y levanta un mapa que muestra que no encontró la isla», asegura el investigador y me lee el diario de Alderete: «Denota que verificó la sonda buscando la isla Bermeja sin encontrar fondo en el mar y sin avistarla».

Doscientos cincuenta años después de los primeros avistamientos, un capitán de navío llamado Ciriaco de Ceballos recorrió la zona del Golfo de México y tampoco pudo encontrarla. En uno de los libros en los que se cuentan sus travesías, «El derrotero de las islas», se asegura que «la buscó al intento por lo que creemos que su existencia no es verdadera. Sin embargo la colocamos en la carta en latitud 22° 33′ Norte, Longitud 85° 10′ Oeste, hasta que reconocimientos más prolijos decidan si existe o no».
Sin embargo, me dice Antochiw, después aparece un capitán inglés llamado Barnett, que recorre la zona del Golfo hacia 1840 y «localiza la Bermeja fuera de la Sonda de Campeche (la plataforma continental). A 100 metros de profundidad existe un pequeño pico en el fondo del mar que él llama la Bermeja. ¿Significa eso que existió?».

En el siglo XVIII y hasta el XX su presencia en la cartografía se hizo menos evidente. Con la llegada de navíos ingleses y estadounidenses a la región, los mapas también se modificaron. Algunos mostraban a la Bermeja y otros no. Tuvieron que pasar otra vez más de 250 años para que una nueva expedición, en 1997, fuera nuevamente a buscar una isla que suele permanecer olvidada durante siglos.

Los mapas que me muestra Antochiw me generan más interrogantes, por lo que decido trasladar mi búsqueda a la Ciudad de México.

Una nueva hipótesis

En medio de las autopistas de la capital mexicana, con su tráfico y su ruido, el Museo Nacional de Cartografía tiene refugio en una antigua capilla. Camino entre sus pasillos y descubro docenas de mapas que me muestran la Bermeja, pero también avisto muchos otros -de la misma época- que no muestran ni un rastro de la isla perdida. El mapa más moderno que encuentro en el lugar data de 1921 y muestra claramente a la Bermeja. ¿Es esa una prueba?

«Déjeme decirle que en un principio pensábamos que la isla existía. Tenemos un atlas imperial de 1794 que muestra a la isla Bermeja en el centro del Golfo de México», me relata Julio Zamora, presidente de la Sociedad Mexicana de Geografía, en su sede en el centro de la Ciudad de México.

«Pero después comenzamos a dudar porque faltaban pruebas de su existencia», me comenta. Después me comparte una teoría completamente nueva. «Los países que hacían los mapas en los siglos XVI y XVII, publicaban sus mapas con diferencias para evitar que sus enemigos los utilizaran. Era su trampa decir les pongo una isla aquí -aunque no exista- para que al verla no pasen por ahí pues esa es la ruta por la que yo quiero navegar, y quiero que esté libre».

¿Será entonces que la ubicación no es la correcta? «Para nosotros la ubicación no es correcta, porque creemos que la isla nunca existió», responde enfático Zamora. «Lo siento mucho porque representa una gran pérdida para mi país. En la situación limítrofe perdemos cerca del 20% de lo que podríamos tener y esos pueden ser potencialmente miles de millones barriles de petróleo. Pero necesitamos clarificar las cosas con base en documentos y no en esperanzas».
Otra vez una mención al petróleo. Mañana entonces exploraremos la relación de la isla con el oro negro y conoceremos a un hombre que cree que la isla sí existió.

Esta historia aún no termina.

DAVID CUEN

BBCNews

UN GRUPO DE CIENTÍFICOS BÚLGAROS DICEN HABER CONTACTADO CON EXTRATERRESTRES

Científicos del Instituto de Investigaciones Espaciales de la Academia Búlgara de Ciencias (BAS) han notificado de estar en contacto con seres extraterrestres

El Diario Novinar de Bulgaria ha informado de que los científicos búlgaros están actualmente trabajando en descifrar pictogramas que se dice que han llegado en forma de los llamados «círculos» con la que los extraterrestres respondieron 30 preguntas formuladas por los investigadores del BAS.

«En la actualidad están a nuestro alrededor, y nos están mirando todo el tiempo. Ellos no son hostiles hacia nosotros, sino que quieren ayudarnos, pero no hemos crecido lo suficiente, a fin de establecer un contacto directo con ellos.
Están dispuestos a ayudarnos, pero no sabemos lo que solicitarles en caso de contacto», dijo Lachezar Filipov, director adjunto del Instituto de Investigaciones Espaciales de la Academia de Ciencias de Bulgaria, citado por el diario Novinar.

Filipov ha dicho que incluso el Vaticano había convenido en que los extraterrestres existían. En sus palabras, los humanos no van a ser capaces de establecer contacto con los extraterrestres a través de ondas de radio, pero sí a través del poder del pensamiento.

Él ha declarado que la raza humana sin duda va a tener contacto directo con los extraterrestres en los próximos 10 o 15 años.

El subdirector del Instituto de Investigaciones Espaciales de Bulgaria también le dijo al diario Novinar que los extraterrestres fueron críticos de la conducta inmoral e la gente en referencia a la injerencia del hombre en los procesos de la naturaleza.

La publicación del diario Novinar sobre los investigadores del BAS en contacto con los extraterrestres viene en medio de una controversia sobre el papel, la viabilidad, y la reforma de la Academia Búlgara de Ciencias, que la semana pasada incluso ha llevado al intercambio de comentarios ofensivos entre el ministro de Finanzas de Bulgaria, Simeon Djankov, y el Presidente Georgi Parvanov.

Fuente: Galaxia Maravillosa

EN BUSCA DE LA ISLA PERDIDA DE MÉXICO

¿Dónde está Bermeja?

«…y por el mismo viento y por veinte leguas está otra (isla) alba: La Bermeja por parecer de lechos de la tal color…». Islario General de Todas las Islas del Mundo, Alonso de Santa Cruz, 1539.

De la Bermeja se escribe mucho, se sabe poco y se especula demasiado.

Es una isla mexicana ubicada en el Golfo de México que un día dejó de existir o se ocultó. La descripción que abre este artículo es quizá la primera -y casi la única- que se haya escrito sobre ese pedazo de tierra en medio del mar.

Su autor era un cosmógrafo español que escuchaba relatos de los capitanes que navegaban hacia el Viejo Mundo, quienes a su regreso describían lo encontrado en sus travesías.

Algún piloto español vio la isla Bermeja en el siglo XVI y dio cuenta de su existencia; después la isla permaneció olvidada durante siglos.

Un pedazo de tierra que aparecía claramente marcado en la cartografía, desapareció y hoy nadie puede encontrarlo. A México se le perdió una isla.

La búsqueda de un tesoro

Un día, por accidente, leí su historia y quedé atrapado. Mi fascinación se acentúo cuando descubrí que no sólo se trataba de una marea de misterio. Esta isla perdida en medio del mar representaba también la búsqueda de un tesoro.

Si Bermeja existiera, empujaría las fronteras marítimas de México en los mares del Golfo, en una zona rica en petróleo.

Por ello desde finales de los años noventa y hasta hace unos meses, diversas expediciones se aventuraron al mar abierto con el fin de localizar Bermeja.
La pregunta desde entonces ha sido ¿dónde esta la isla Bermeja?

En algunos mapas, por ejemplo, la Bermeja aparecía en una posición, pero en otros se veía en un lugar diferente, y en algunos más ni siquiera aparecía.

Pero ¿y el petróleo? La isla importa por el impacto que podría tener en la economía mexicana al darle a este país derechos de explotación en una zona que hoy es parte de las aguas internacionales. ¿Será entonces en el oro negro donde hay que buscar la clave de su desaparición?

Un viaje contado en cinco días

Para conocer un poco más sobre la Bermeja había que salir de Londres, cruzar el Océano Atlántico, aterrizar en México y adentrarse en las aguas de su Golfo. Y eso es exactamente lo que hice.
En el camino recolecté información, hablé con expertos en geografía y petróleo, me entrevisté con políticos, navegué por la marea alta del Golfo de México sufriendo sus embates como un marinero novato, charlé con pescadores y visité los últimos pedazos de arena que México tiene en el mar.

Quiero invitarlos a que, durante cinco días, recorramos juntos la bitácora de mi viaje en busca de la Bermeja e intentemos desenredar juntos la madeja de esta historia.

Aquí podemos empezar un diálogo. En estas líneas yo les compartiré lo que ví, lo que escuché y lo que aprendí. Por lo pronto los invito a que escriban sus dudas o compartan sus teorías sobre esta historia. Aquí también les iré respondiendo.

La primera parada, mañana, la haremos en los mapas. Si Bermeja estaba en ellos, ése es un buen lugar para iniciar la búsqueda.

Levemos anclas.

DAVID CUEN

BBCNews

¿EXISTIÓ REALMENTE EL TERCER IMPERIO DE AMÉRICA? EL MISTERIO DE LA CULTURA OMAGUA

El primer dato histórico de la existencia de una confederación de tribus, denominada Omagua, que vivía en los enormes territorios desconocidos al este de los Andes, se remonta a 1530, cuando el comandante Diego de Ordaz recorrió el río Orinoco (ahora llamado Marañón), en busca de oro y piedras preciosas.
Según algunos, fue justamente Diego de Ordaz quien, con su primera exploración del Orinoco alimentó la leyenda de El Dorado, basándose en las historias de los indígenas, que encontró durante la navegación del gran río. Este, partió de San Lucar de Barrameda el 20 de octubre de 1530, para llegar a la desembocadura del Orinoco después de un mes de navegación. Lo navegó a lo largo de seiscientas millas hasta llegar a una aldea indígena llamada Huyapari. La expedición siguió luego por tierra hasta alcanzar la desembocadura del río Meta. Aquí tuvo contacto con nativos que se adornaban con esmeraldas gruesas como el puño de una mano.
Había versiones según las cuales, avanzando por la selva durante catorce días en dirección suroeste, se llegaba a una montaña de esmeralda llamada la roca de Euphoide. En seguida se relata un pasaje de las Noticias historiales de las Conquistas de tierra firme de fray Pedro Simón, que narra la empresa del castellano:

Algunos días antes de la llegada del Comendador Diego de Ordaz a este golfo y bocas del gran río, se habían divisado una canoa y cuatro indígenas, que tenían consigo una piedra de esmeralda grande como una mano. Cuando se les preguntó donde la habían encontrado, respondieron que navegando el río hacia arriba, durante algunos días, se llegaba a una montaña entera de esmeraldas. Una vez recibidas estas noticias el capitán Diego de Ordaz decidió comenzar su descubrimiento desde aquel lugar.

La roca nunca fue descubierta, ya fuera por los continuos ataques de feroces indígenas, o por los conflictos internos entre los componentes de la expedición, algunos de los cuales querían regresar hacia el Orinoco. Ordaz, encontrándose en un ambiente difícil y hostil, decidió volver al Orinoco, donde había dejado un contingente custodiando las naves, convirtiéndose así en el primer europeo que navegara y explorara el gran río venezolano.
A su regreso hacia el delta, en 1532, Diego de Ordaz fundó, en la confluencia del río Caroni con el Orinoco, el pueblo de Santo Tomé de Guayana, donde hoy se encuentra la ciudad de Puerto Ordaz (Ciudad Guayana). Pocas semanas después murió debido a una enfermedad fulminante.
El relato de su viaje sirvió de base para las expediciones sucesivas, y aunque muchas de las informaciones sobre la riqueza de los lugares encontrados resultaron excesivamente exageradas, él fue siempre recordado como uno de los exploradores más interesados por la geografía y por la descripción de las tierras americanas.
Durante los años ulteriores a la conquista del Perú, el soberano de España, Carlos V, quien carecía constantemente de fondos, buscó el apoyo de algunos financiadores europeos para patrocinar nuevas expediciones. Por consiguiente, los banqueros alemanes Wesler le hicieron préstamos. En compensación, se permitió a la familia Wesler explotar económicamente a Venezuela. Naturalmente, su principal interés era la legendaria ciudad de El Dorado, de la cual tanto se hablaba en Europa en aquellos años. Uno de los aventureros que los Wesler enviaron a Venezuela fue George Hohermoth, originario de Espira. Su nombre se españolizó en Jorge Espira.
Estaba acompañado por otro explorador alemán, cuyo nombre era Philipp Von Utten, llamado luego Felipe de Utre.
Su expedición partió de Coro en 1535 con el objetivo de encontrar El Dorado o al menos una cantidad de oro y de piedras preciosas suficientes para resarcir a los banqueros del préstamo hecho a Carlos V, puesto que era incierta la posibilidad de obtener una indemnización directa del rey.
Una tropa de trescientos hombres y cien caballos recorrió el curso del Río Toyuco a través de los Andes y descendió a las mesetas del Meta en el actual territorio colombiano.
Durante la marcha hubo enfrentamientos violentos con indígenas Choques, Guaiquevies y Chiscos, pero las pérdidas mayores fueron a causa de la malaria fulminante y de las fiebres violentas que atacaron a los europeos. Jorge Espira acampó en el Meta, en donde pasó el invierno del 1536.
Durante largos meses lluviosos, los europeos fueron a menudo atacados por otros grupos indígenas y se vieron obligados frecuentemente a defenderse de ataques de jaguares que mataron varios caballos.
Con el fin de las lluvias, empezaron a recorrer el curso del río Ariari, que creían que los llevaría a la mítica ciudad.
Sucesivamente recorrieron el curso del Guayare, pero en vez de encontrar la ciudad de El Dorado, se encontraron un grupo de indígenas Guayupes, hostiles y belicosos. Hubo una batalla sangrienta y los europeos, a pesar de las enormes pérdidas, salieron victoriosos.
La aldea Guayupes fue después inútilmente destruida por completo y todos los indígenas fueron asesinados.
Luego, los conquistadores europeos continuaron avanzando y encontraron una tribu de Papemenes, que los acogió amigablemente.
Sucesivamente hubo, sin embargo, otro enfrentamiento con indígenas Choques, violentos y antropófagos.
Los europeos, que se les habían acabado la pólvora para disparar, combatieron con espadas y muchos fallecieron en la feroz batalla.
El coronel Joaquín Acosta, en su libro Descubrimiento y Colonización de la Nueva Granada (1901), describe así a estos nativos:

Los Choques eran sucios, feroces y se alimentaban de carne humana. Como armas usaban huesos afilados de los que fueron sus enemigos, puestos en largas cañas de bambú. El Capitán Jorge Espira envió a Esteban Martín, junto con otros soldados para explorar las tierras situadas al oeste y al sur. No llevaron caballos para ir más livianos y esta fue la razón por la que no pudieron romper las filas de una escuadra de varios Choques, que se resistieron a la batalla, mataron a Esteban Martín y a su suplente y obligaron a los otros españoles a retirarse dejando a muchos soldados. Los Choques eran determinados y feroces en la batalla. Cuando los invasores se retiraron quedaron inmóviles bajo la lluvia como para defender el propio dominio…. En esta ocasión, se vio con claridad que los europeos sin armas de fuego ni caballos estaban muy vulnerables. La pólvora había terminado y los arcabuces, ahora inútiles, representaban sólo una carga inútil.

Jorge Espira se dio cuenta de que ya no era posible seguir avanzando, también porque nuevas tribus de Choques estaban listas para otras batallas y decidió regresar a Coro, pensando en haber casi llegado a la tierra de El Dorado.
Creyó que los Choques eran los guardianes de la ciudad perdida, y pidió a los Wesler otras tropas para poder organizar una segunda empresa.
Sus peticiones, sin embargo, fueron denegadas, puesto que las pérdidas del viaje habían sido exageradas, y así Jorge Espira murió con la convicción de haber llegado a sólo un paso del mítico Dorado, pero de no haber podido verlo, ni conquistarlo.
Mientras tanto Felipe de Utre temblaba por partir de nuevo. En 1540 pidió que se le reconociera como gobernador de Venezuela, pero sólo se le concedió el título de capitán general.
Pronto organizó una nueva expedición, en la cual fue acompañado por Bartolomé Wesler. Avanzó a lo largo de los valles de la cuenca del Orinoco más allá de los Andes, y llegó al Meta, a las fuentes de los ríos Motoya y Payoya, donde entró en la tierra de los Mayas. De ellos aprendió que en la confluencia de los ríos Motoya y Guacaya se encontraba Ocuarica, la fantástica ciudad de los Omagua.
Felipe de Utre, que creía estar cerca de la meta, después de haber cruzado el Guaviare llegó a un pueblo llamado Macatoa, habitado por tribus de Guayupes. En un pasaje del libro Noticias historiales de Tierra Firme, escrito por Fray Pedro Aguado en los últimos años del siglo XVI, se dice que:

Caminaron cinco días atravesando tierras aspérrimas y vastas florestas, entonces vieron en la distancia una gran ciudad en el centro de la cual había un castillo que por tamaño y altura superaba muchas veces a los otros: la fortaleza Quarica, Señor de Omagua.

El fraile Pedro Aguado narró que el Cacique Quarica llevaba consigo ídolos de oro tan grande como niños, y que su mujer estaba totalmente cubierta de oro. Estos grupos tribales cerraron el paso a Felipe de Utre que, tras las fuertes pérdidas, se vio obligado a retirarse y regresar a Venezuela, a donde llegó en 1545, después de cinco años de ausencia. En Coro mientras tanto se había nombrado un nuevo gobernador, el español Juan de Carvajal. Después de varias discusiones con el mismo gobernador, el alemán fue decapitado en la aldea recientemente fundada de El Toyuco, en 1546.
Después de un exhaustivo estudio geográfico y antropológico se llegó a la conclusión de que Felipe de Utre había explorado el territorio de los Carijona, más allá de lo que ahora se llama río Apaporis, un afluente del río Caquetá. La visión casi mística en la que Felipe de Utre observa desde lejos una ciudad de templos y palacios de oro que creía que era El Dorado, fue interpretada en el siglo XIX por el famoso geógrafo y cartógrafo italiano Agustín Codazzi, en su obra Geografía Física y política de los Estados Unidos de Colombia, como:

un grupo de rocas y de pináculos de granito de formas extrañas que existen en las cercanías del Río Macaya. Desde lejos parecen edificios, ruinas de fortalezas, torres de piedra …

Muy probablemente Felipe de Utre estaba observando desde lejos la Serranía de Chiribiquete, tierra ancestral de los Carijona, que hoy es parte de un parque nacional en Colombia, en el departamento de Caquetá.
La siguiente descripción de los Omagua fue la de Gaspar de Carvajal, el capellán de Francisco de Orellana en su viaje a través del Río Amazonas en 1542.
El 21 de mayo llegaron a la confluencia de un río que entraba del lado derecho. Tres islas delimitaban el estuario. El fray Gaspar de Carvajal lo llamó Río de la Trinidad (Río Juruá). En las orillas cercanas a la convergencia de los dos ríos había grandes pueblos.
Orellana se dio cuenta de que se encontraban en el mítico territorio de los Omagua, tal como Aparia el grande se lo había descrito. Desde el río se vislumbraban grandes malocas y abundancia de ánforas finamente talladas. ¿Era aquel el legendario El Dorado? He aquí una descripción del libro de Gaspar de Carvajal Relacion del nuevo descubrimiento del famosos Rio Grande que descubriò por muy gran ventura el Capitan Francisco de Orellana (1542):

El domingo después de la Ascensión de Nuestro Señor, salimos desde dicho pueblo y comenzamos a caminar, y no hubimos andado obra de dos leguas cuando vimos entrar por el río otro río muy poderoso y más grande a la diestra mano: tanto era de grande que a la entrada hacia tres islas, de causa de las cuales le pusimos el (nombre) de Río de la Trinidad; y en estas juntas de uno y de otro lado había muchas y muy grandes poblaciones y muy linda tierra y muy fructífera: esto era ya en el señorío y tierra de Omagua, y por ser los pueblos tantos y tan grandes y haber tanta gente no quiso el Capitán tomar puerto, y así pasamos todo aquel día por poblado con alguna guerra, porque por el agua nos las daban tan cruda que nos hacían ir por medio del río; y muchas veces los indios se ponían a platicar con nosotros, y como no los entendíamos no sabíamos lo que nos decían…

De los conocimientos actuales, adquiridos no sólo gracias al estudio de documentos y libros antiguos, sino también a las evidencias arqueológicas halladas en la Serranía de Chiribiquete, se deduce que los Omagua dominaban gran parte de la cuenca amazónica (que pertenece ahora a los países de Colombia, Brasil y Perú).
Practicaban la agricultura a gran escala y se dedicaban a la artesanía, pues producían ánforas de cerámica y joyas de oro. El nombre Omagua quizá quería decir cabeza deformada. En efecto, estos indígenas solían desfigurar el cráneo de los niños, apretando fuertemente sus cabezas con vendas, por motivos religiosos o para distinguir un clan de otro.
Algunos investigadores que estudiaron mucho los montículos ceremoniales presentes en el departamento colombiano del Meta, hablan de una cultura desaparecida, llamada Gua, que dominó, hasta 1650, los inmensos territorios de la Orinoquía y Amazonía colombiana.
¿Podemos pensar que la cultura Omagua o Gua fue una especie de confederación de tribus y que por tanto fue el tan anhelado “tercer imperio de América”, tal como lo llamaban los conquistadores españoles (después del azteca y el incaico)?
De hecho, esta especie de confederación de tribus existió realmente, como lo demuestra la relación de Gaspar de Carvajal en 1542. Muy probablemente, estos indígenas pertenecían a la etnia Caribe, tenían un gobierno común y vivían en aldeas bastante distantes entre ellas, pero unidas por antiguos senderos, como el Nhamini-wi, que conecta a Colombia con Roraima.
Se piensa que fue el Chiribiquete el centro de su cultura, el cual en los siglos sucesivos fue habitado por los Carijona, indígenas de etnia Caribe.
Los libros de Historia y arqueología no describen a los Omagua como una confederación de tribus, ya que este antiguo pueblo fue diezmado por los virus de los cuales los invasores europeos eran inconscientemente portadores. En efecto, ya desde los primeros viajes de los conquistadores alemanes y de Francisco de Orellana, los virus de la viruela y otras enfermedades se difundieron entre los nativos amazónicos, pero sobre todo a partir de 1680, con las incursiones de los jesuitas españoles (provenientes de Quito) y de los religiosos portugueses (procedentes de Belém), virus y bacterias de esparcieron cada vez más, borrando para siempre la cultura ancestral de los Omagua.
El último testimonio directo de la cultura Omagua se remonta a los últimos años del siglo XVII, cuando el padre Samuel Fritz recorrió los territorios del Río Amazonas en las confluencias con los afluentes Putumayo, Juruá, Purús y Caquetá.
Se piensa que posteriormente, a partir del siglo XVIII, los sobrevivientes de la etnia Omagua se adentraron en lo profundo del Caquetá, resguardándose en sus tierras ancestrales del Chiribiquete, donde sus antepasados, muchos siglos antes, habían realizado bellísimas pinturas rupestres en las cavernas de la zona (ver las primeras tres fotos arriba a la derecha). Los Carijona sobreviven aún hoy, pero el estudio arqueológico y etnográfico de su cultura es particularmente complicado porque, por desgracia, su región (departamento de Caquetá), apenas ahora está superando un largo período de inestabilidad e inseguridad.
Por consiguiente, el misterio de la existencia de El Dorado amazónico, de la cultura Omagua y del llamado “tercer imperio de América”, está encerrado en una de las zonas más inaccesibles del planeta, el Parque Nacional del Chiribiquete, llamado a menudo “el mundo perdido”. Sólo con serios estudios arqueológicos y etnográficos se podrá develar, en el futuro, la realidad de una etnia casi desconocida que, además del oro, se servía mucho de las plantas medicinales y hierbas curativas, cuyo uso se perdió en el tiempo.

YURI LEVERATTO

CUÁNTICO LIBROS: UNIVERSOS PARALELOS, MICHIO KAKU

«En “Universos paralelos”, Michio Kaku hace gala de todo su formidable talento didáctico para enfrentarse a una de las más extrañas y excitantes posibilidades reveladas por la física contemporánea: que nos encontremos en uno más de los muchos, quizás infinitos, universos que han surgido en el Cosmos. Con un uso habilidoso de la analogía y el humor, Kaku introduce pacientemente al lector en todas las variaciones sobre los universos paralelos procedentes de la física cuántica, la cosmología y la reciente teoría M. De la mano de un experto guía, asistimos a un maravilloso recorrido por un Cosmos cuya comprensión nos fuerza a alcanzar los últimos límites de la imaginación.»

Brian Greene, autor de «El universo elegante»

«Aquellos que disfruten con un recorrido por la cosmología, los viajes en el tiempo, la teoría de cuerdas y el universo de diez u once dimensiones no encontrarán mejor guía que Michio Kaku, quien no sólo ha investigado en estas áreas, sino que a la vez sabe cómo presentar este intrigante y complejo material con un estilo fluido y accesible.»

Donald Goldsmith, autor de «The Runaway Universe»

Newton y Einstein nos liberaron de la superstición y del misticismo del pasado. El primero nos dio unas leyes precisas y mecánicas que guiaban todos los cuerpos celestes, incluido el nuestro. En realidad, las leyes eran tan precisas que los seres humanos se convirtieron en simples loros que repetían sus frases. Einstein revolucionó nuestra manera de ver el escenario de la vida. No sólo era imposible definir una medida uniforme del tiempo y del espacio, sino que el propio escenario era curvado. No sólo se sustituyó el escenario por una lámina tirante de goma, sino que además se expandió.

La revolución cuántica nos dio una imagen aún más extraña del mundo. Por un lado, el desmoronamiento del determinismo significaba que las marionetas podían cortar sus cuerdas y leer sus propias frases. Se restauró el libre albedrío, pero al precio de obtener resultados múltiples e inciertos. Esto significaba que los actores podían estar en dos lugares al mismo tiempo y que podían desaparecer y reaparecer. Se hizo imposible decir con seguridad dónde estaba un actor en el escenario o en qué momento.

Ahora, el concepto del multiverso nos ha procurado otro cambio de paradigma, según el cual la palabra «universo» podría volverse obsoleta. Con el multiverso, hay escenarios paralelos, uno encima del otro, con trampillas y túneles ocultos que los conectan. Los escenarios, en realidad, dan lugar a otros escenarios, en un proceso interminable de génesis. En cada estadio, surgen nuevas leyes de la física. Quizá sólo en un puñado de estos escenarios coincidan la vida y la conciencia.

Hoy en día somos actores que vivimos en el primer acto, al principio de la exploración de las maravillas cósmicas de este escenario. En el segundo acto, si no destruimos nuestro planeta mediante la guerra o la contaminación, podríamos ser capaces de dejar la Tierra y explorar las estrellas y otros cuerpos celestes. Pero ahora vamos tomando conciencia  de que falta la escena final, cuando la obra termina y todos los actores perecen. En el tercer acto, el escenario se vuelve tan frío que la vida se torna imposible. La única salvación posible es abandonarlo a través de una trampilla y empezar otra vez con una nueva obra y un nuevo escenario.

MICHIO KAKU, Universos Paralelos

Editorial Atalanta

LOS PIRATAS EUROPEOS, VERDAD SOBRE SOMALIA

Con el reciente secuestro de un barco atunero español en aguas de Somalia, los medios occidentales han hecho una nueva fiesta de premisas alienantes. El tema se solucionó con el pago de unos cuantos millones de parte del ejecutivo español a los presuntos «piratas»; en Europa llaman a la «mano dura», al linchamiento y la persecución de esos «terribles delincuentes», pero, ¿cuál es el otro lado del problema?

Al parecer cuesta mucho mirar en las notas «informativas» de la gran prensa, que los secuestros de los barcos europeos se hacen en AGUAS SOMALÍES, es decir, nadie se ha preguntado ¿por qué los barcos de los europeos explotan libremente la riqueza de los mares de una nación tan pobre como Somalía?, nadie se pregunta si a Somalia le queda algún beneficio de la explotación de sus mares por parte de extranjeros.

Acaso si un barco cualquiera fuese a pescar bacalaos en el mar territorial de algún país europeo, los pescadores nativos y sus fuerzas armadas recibirían a los extranjeros como fuegos artificiales y agasajos de champagne. Sin ir más lejos ¿cómo se recibe en el aeropuerto de Barajas en Madrid a los visitantes originarios de América del Sur?, llueven las denuncias sobre aislamientos, atropellos y abusos de la «gloriosa» Guardia Civil española.

Nadie se ha preguntado tampoco ¿qué derecho tienen los barcos militares de las naciones europeas para ingresar a las aguas de un país soberano?¿Quiénes son entonces los piratas… los marineros somalíes o los europeos que se van a buscar los atunes que huyeron de la depredación de los «desarrollados»?

Somalia es un país convulsionado políticamente, lmenos del 30 por ciento del país tiene acceso al servicio de agua potable, los índices de mortalidad infantil y materna están entre los más altos del mundo, la desnutrición afecta al 17% de niños y niñas. Casi 400 mil personas viven en condición de desplazados debido a guerras tribales instigadas por los «indefensos gobiernos occidentales» que hoy se quejan de la amenaza «pirata».

La manipulación y las mentiras sobre Somalia, no se circunscriben al tema de los piratas, investigue usted en internet sobre este país y verá que en la mayoría de sitios web le dirán que Somalia es un país muy pobre, desértico, sin tierras para cultivar, un país desahuciado le mostrarán. Por supuesto no mencionarán cuantas miles de toneladas de atún extraen los europeos de sus aguas. Acaso habrá que preguntarle a los marineros españoles del Alakrana, cuánto pescado podían extraer, que su ambición podía más que el «riesgo» de los piratas.

En los años 90 cuando la guerra anarquizó a Somalia, los europeos vieron en este territorio la oportunidad perfecta para los negocios sucios y para aprovisionarse del alimento que roban al pueblo somalí. ¿A quién responden los barcos «piratas» europeos que lanzaron desechos tóxicos en las costas somalíes?.

Centenares de personas murieron a causa de los barriles de la muerte, pero ningún escándalo sobre esto hubo en la prensa occidental, esa que corre despavorida a señalar a los piratas.

En Mogadiscio y en los pueblos de la costa somalí si hay fiesta cuando sus marineros logran el objetivo. Un gran éxito tuvieron frente al poderoso Estado Español… los reportes indican que un ambiente festivo se respiraba este miércoles en el poblado costero somalí de Harardhere, donde los piratas mantuvieron secuestrado el atunero español «Alakrana», en cuanto se corrió la voz del pago de un rescate estimado en más de tres millones de dólares por el navío.

Los medios de occidente tienen la delicadeza de resaltar que si los habitantes del poblado tuvieran a su disposición fuegos artificiales los hubieran lanzado toda la noche.

Chevige González Marcó
Patria Grande

Fuente: http://periodicopg.com.ve/?q=node/21979

 Recogido de Rebelión

LA NUEVA CIENCIA: NBIC

Investigadores rusos se proponen crear una ciencia novedosa, llamada NBIC, por las iniciales de cuatro tecnologías en que se basa: nano, bio, de información y cognitivas.

La combinación de estas asignaturas sentará el fundamento de la ciencia del futuro y podrá garantizar la transición a recursos y tecnologías renovables que se inspiran en la propia Naturaleza y usan los últimos logros científicos, afirmó hoy Mijaíl Kovalchuk, director del centro de investigación del Instituto Kurchatov. También contribuirá a crear «una plataforma para el diseño de nuevos medicamentos, y otra más, para ingeniería genética», dijo.

Ya se formó en el Instituto Kurchatov un centro NBIC que incluye un área de nanotecnologías, una fuente modernizada de radiación sincrotrónica, un reactor de neutrones y una supercomputadora  para procesamiento y almacenamiento de datos.

RIANovosti