Es un tema recurrente en las películas de Ciencia Ficción del último medio siglo; desde la adaptación de George Pal del clásico de H.G.Wells, La Máquina del Tiempo, la increíble idea de saltar épocas a través del espacio y el tiempo ha plagado nuestras ciencias y las mejores ficciones del pasado y el futuro.
De hecho, el tema es tan usado hoy día que, tras décadas de rodar por las pantallas, se hace difícil imaginar que el viaje en el tiempo podría ser real sin alienígenas, robots y tipos con armas laser, o sin el retorno al presente desde algún futuro postapocalíptico para salvar al confiado pasado de un futuro infierno robótico.
Mi obvia referencia a la franquicia Terminator no pretende descartar otros clásicos, tales como la trilogía de Retorno al Futuro, así como la favorita «forteana», El Experimento Filadelfia(1984), protagonizada por Nancy Allen y Michael Pare. ¿Pero cuánto habría de «real» en el viaje en el tiempo que vemos en las películas? Y quizás lo que es más importante, ¿sería el mundo real que vemos en los cines como lo que esperaríamos, o podría haber otros modos de «viaje» a través del tiempo que no implicasen ningún viaje en absoluto?
Parte de lo que he plasmado en estas líneas tiene que ver con las aparentes conexiones entre el fenómeno OVNI y el viaje en el tiempo. Mientras muchos informes de abducidos experimentan lo que ellos llaman un «tiempo perdido», hay al menos algunos partidarios de la creencia que el enigma OVNI en su totalidad es en realidad el resultado de visitantes transhumanos de nuestro futuro, que pilotan avanzadas naves capaces de impresionantes movimientos a través no sólo del espacio, sino también del tiempo. Este concepto está más desarrollado en mi próximo libro, La Singularidad OVNI, que estará a la venta el 22 de diciembre de 2012.
Pero más allá de los hipotéticos escenarios alrededor del viaje en el tiempo y los OVNIS, vamos a apuntar a la ciencia misma tras la percepción del pasado, presente y futuro, donde yo a menudo me he preguntado si los cambios esperados para las generaciones futuras podrían causar cambios radicales no sólo sobre nuestra tecnología, sino también sobre los niveles de percepción humanos. Esto podría conducir a la capacidad para aparentemente «mirar» a través de la memoria no sólo de nuestro pasado, sino también de hechos futuros; y si fuera así, ¿cómo se lograría esto, sería intencionado? En otras palabras, ¿podrían los humanos llegar hasta los inicios para ser capaces de cambiar el modo que nosotros pensamos sobre los fenómenos «psi» y, tal vez lo más importante en este tema, más desconocidas vías para el «viaje» a través del tiempo?
Lo que estamos hablando aquí podría no implicar el uso de algún tipo de aparato para viajar en el tiempo. En vez de eso, parece más lógico que los niveles de percepción humana, con la llegada de más complejas y miniaturizadas aplicaciones cerebrales, podrían comenzar a desdibujar las líneas entre presente, pasado y futuro, a nivel perceptual. En su libro Una Breve Historia del Tiempo, Stephen Hawking sostiene que el flujo natural de entropía entre el curso de todas las cosas en el espacio-tiempo influye en el modo en que los humanos piensan y, más importante, recuerdan. En otras palabras, nuestras funciones cognitivas obedecen leyes naturales donde la entropía causa una tendencia hacia el caos. Sin embargo en el caso de que algo como una «entropía inversa» fuera adquirida, deberíamos considerar si la nanotecnología y otras avances miniaturizados de las ciencias podrían un día ser aplicados para su incorporación al cuerpo humano. No sólo podrían ser cambiados drásticamente los niveles de percepción del espacio y tiempo en los próximos años,-y lo suficiente para permitir la percepción del futuo así como del pasado-, sino que los humanos podrían incluso conseguir un día la inmortalidad.
Es algo para pensar, por el momento… y mientras no sea posible constituye lo que nuestras películas de hoy definirían como «viaje temporal», podría haber un tiempo cuando la mente humana (o alguna modificación transhumanista que llegue después) que resultaría en algo más que similar a un «viaje mental».
MICAH HANKS
O_O