VIAJAR SIN PERDER EL TIEMPO
Trasladar cuerpos a través del espacio sin perder tiempo resulta increíblemente fantástico. Pero el teletransporte es posible. Anton Zeiliger, de la Universidad de Viena, logró teletransportar por primera vez fotones, es decir, partículas de luz, en 1997. Para ello trabajó con una luz láser altamente energética. Las partículas de luz se unieron por parejas de un modo muy específico. En consecuencia, su unión permaneció estable, independientemente de la distancia física que separase las partículas. En cuanto Zeilinger modificaba una partícula, se modificaba también instantáneamente su «partícula gemela». De esta manera fue posible teletransportar las informaciones de átomos e incluso de una nube compuesta de gas de cesio. En pocas décadas podría ser posible teletransportar un virus. Pero aún pueden pasar siglos hasta que se consiga teletransportar a una persona.
MICHIO KAKU, Física de lo imposible (Recogido de Planeta Fascinante, adaptación de Ernesto Avelino)
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